El organismo monetario acaba de limitar el giro de utilidades de los bancos. Busca que no repartan sus beneficios con los balances maquillados
El directorio del Banco Central acaba de limitar la distribución de resultados por parte de las entidades financieras, con una normativa que causó revuelo en la city porteña. A través de la Comunicación A 6768, difundida hace algunas horas, el organismo dispuso que desde hoy mismo "las entidades financieras deberán contar con la autorización previa del Banco Central para la distribución de sus resultados".
La primera lectura que hacen en el mercado es que la normativa apunta a evitar que los bancos giren dividendos al exterior, en un momento en que la oferta de dólareses limitada. Frenar el giro de utilidades a las empresas extranjeras fue una de las alternativas que en los últimos días barajaron en el Gobierno pero que prefirieron no tomar.
Otras medidas que había estudiado el equipo económico era volver a poner restricciones a los capitales de corto plazo (encaje) y a la compra de dólares de altos montos (u$s 2 millones mensuales).
En el mercado especulan con que esta medida es la antesala de un control al giro de utilidades en empresas de otros sectores.
"Lo hacen también porque como los activos de los bancos se están desplomando, si no los computan bien, pueden estar diciendo que tienen más ganancias y distribuir utilidades cuando se te están cayendo los depósitos", aporta el ex BCRA y agrega: "Además de restringir la salida de dólares es preventivo".
En ese sentido, según detalla la nueva normativa, en el proceso de autorización la Superintendencia de Entidades Financieras y Cambiarias tendrá en cuenta, entre otros elementos, "los potenciales efectos de la aplicación de las normas internacionales de contabilidad según Comunicación "A" 6430 (que se refiere al deterioro de valor de activos financieros) y de la reexpresión de estados financieros prevista por la Comunicación "A" 6651.
En la gestión de Federico Sturzengger no sólo se eliminó la necesidad de tener la aprobación oficial para distribuir dividendos, sino que directamente se autorizó a los bancos a distribuir sus beneficios sin autorización. Ahora tiene que haber autorización.
Consultados al respecto, desde el organismo monetario prefirieron no realizar declaraciones.
Fuente: iprofesional.com