En el último mes del año, los precios aceleraron con fuerza. El 2020 terminó con un IPC de 36,1%, lo que implicó una baja respecto al 2018 y al 2019. Las claves fueron la recesión pandémica, las paritarias a la baja, los controles de precios, el cepo y los congelamientos de tarifas
La Inflacón aceleró con fuerza en el último mes del 2020: fue de 4%, lo que implicó un salto de 0,8 punto respecto a la de noviembre. En un mes con estacionalidad alcista, por el incremento que suele representar en el consumo, los que más traccionaron volvieron a ser los Alimentos y bebidas, que sufrieron un incremento de 4,4% y tienen alta ponderación dentro del IPC. Ese dato tiene, además, implicancias negativas en términos sociales.
Los números fueron publicados por el Indec a través del informe del IPC Nacional de diciembre. Las que más impactaron sobre los precios de los alimentos fueron "las subas en Carnes y derivados, con una incidencia más elevada en las regiones donde tienen mayor ponderación, y Frutas", tal como destacó el informe. Se destacaron los incrementos de 28,5% en el asado, de 20% en la nalga, de 16,1% en el pollo, de 19% en el cuadril y de 11% en la carne picada.
Con todo, el año terminó con un IPC de 36,1%, lo que significó una baja de 17,7 puntos respecto al 2019. Para el 2021 las proyecciones apuntan a una nueva aceleración que volvería a la dinámica de precios a niveles del 2018, cuando terminó en 47,6%. Según el promedio de las respuestas de los analistas consultados en el último Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM), realizado por el BCRA, llegaría a 48,6% este año. En cambio, según las respuestas de "la calle", de la encuesta de expectativas de inflación del Centro de Investigación en Finanzas de la Universidad Torcuato Di Tella (CIF-UTDT), sería de 42,9%.
Alimentos y bebidas fue la división que más traccionó por su importancia dentro de la canasta. Pero, tal como destacó el informe del Indec, "las divisiones Salud (5,2%) y Recreación y cultura (5,2%) fueron las de mayor aumento en el período. En el primer caso, principalmente debido a las subas en productos farmacéuticos y los aumentos en los planes de medicina prepaga, mientras que en el segundo caso incidieron los Servicios recreativos y culturales. En la división Transporte (4,9%) sobresalieron los incrementos en la adquisición de vehículos, combustibles, y pasajes aéreos y ómnibus de larga distancia".
Además, agregó: "En la división Vivienda, agua, electricidad y otros combustibles (3%) incidió la suba en Alquiler de la vivienda y gastos conexos, producto del pago del bono no remunerativo a encargados de edificios –particularmente en la región GBA–, mientras que en la división Equipamiento y mantenimiento del hogar (2,4%) incidió el incremento en los servicios domésticos y para el hogar. El aumento en cigarrillos explicó la mayor parte de la suba en Bebidas alcohólicas y tabaco (3,4%)".
Fuente: Baenegocios.com