El mundo nació a medida del hombre, en contraposición si germinaste mujer, tus ideas serán recibidas generalmente con tanto escandalo y escarnio como la proposición de que la tierra no era plana, sino redonda. Frente al incumplimiento de tus derechos, deberás convertir tus plegarias en sonoros pasos en el cascajo de las calles, deberás hacerte oír con las palmas golpeando cada meta, deberás clamar tus palabras para que sea ley, deberás escribir los sentimientos de tus pensamientos, para que no se olviden en el tiempo, y por último deberás saber que naciste mujer. Recién, para ese entonces, sabrás que las luchas son siempre más arrías, y deberás ganarle la pulseada a la suerte para que tu vida no se la lleve la muerte. Porque, despertar de la obediencia, ser libre de lo instituido, significa irritar, salirse del molde, y como consecuencia ser mujer con sapiencia personal. La mujer, no es parte del derecho de propiedad, ya que nunca fuimos un bien, ni tuvimos atributos de posesión ni de tenencia frente a otro sexo. Sin embargo, los caracteres que definen a la propiedad: “perpetuidad, moral, exclusividad, excluyente y limitada”,
se asemejen al engendrado, y arcaico pensamiento que los hombres supieron establecer de la mujer a través de la historia de la humanidad. Descreo de las casualidades, y si afirmo la causalidad, como dice Borges “...lo que llamamos azar es nuestra ignorancia de la compleja maquinaria de la causalidad...” Nuestra lucha, supo avanzar por el único camino posible: “A tientas a través de la oscuridad “. Mientras, pensadores con el irrefutable intelecto de Rousseau, reflexionaban acerca de los derechos de la mujer así: “Otros, no contentos con asegurar sus derechos, las impulsan a usurpar los nuestros: porque declararla superior a nosotros por las cualidades propias de su sexo al hombre en las restantes, ¿no es acaso transferir a la mujer la superioridad que la Naturaleza otorgo a su marido? Ergo, supimos construir desde un punto muerto, nuestros derechos, desnaturalizamos las teorías de Dios, derribamos las falsas conjeturas de herejes, y brujas que convergieron en la gran beligerancia cultural que hoy es gloria, y no pena.
La primera mujer que marco mi vida, se llamó Alfonsina Storni, leí su primera poesía a los 12 años, encontré en su prosa un refugio, un sentimiento latente y vivo cuando pronunciaba en la poesía “Bien pudiera Ser”: “Bien Pudiera ser que todo lo que en verso he sentido/No fuera más que aquello que nunca pudo ser/No fuera más que algo vedado y reprimido/De familia en familia, de mujer en mujer”. Alfonsina, fue una de las escritora más contemporánea y feminista de principio de siglo, hija de padre ferroviario, padeció los avatares de una sociedad machista con la muerte de su progenitor. A temprana edad, supo trabajar de camarera, obrera, y lavaplatos. La situación económica de su madre, le contrajo mucha tristeza que se canalizo en bellos versos, lo que avivaron críticas y rabia en una sociedad que no estaba preparada para ella. Alfonsina, fue madre soltera, no fue reconocida en su tiempo, tal vez esa fue una de las causas por las que se sumergió en las aguas de la playa "La Perla", de Mar del Plata, un 25 de octubre de 1938, huyendo de una penosa enfermedad oncológica y de la soledad que la invadía.
En la semana del aniversario del tan preciado voto femenino, Ley 13.010, también conocida como Ley Evita, sancionada en Argentina el 9 de septiembre de 1947 y promulgada el 23 de septiembre, que estableció el día como "Día Nacional de los Derechos Políticos de la Mujer". En esa fecha, se nos reconoció la igualdad de derechos políticos entre mujeres y hombres: el derecho de las mujeres a elegir y ser elegidas para todos los cargos políticos nacionales, además de establecer en nuestro país el sufragio universal, aprobado durante el gobierno de Juan Domingo Perón. Así, nacían los primeros signos de igualdad hacia la mujer, de la mano de la amada y odiada, Eva Duarte. Eva, fue objeto de los insultos, infamias, descalificaciones, y mentiras más efervescentes de la clase política conservadora de su época, sólo por el hecho de haber nacido Mujer.
La lucha cuesta vida, y la vida trae muertes de miles de mujeres que mueren a diario producto de la violencia, abuso, violación, asesinato en nuestro país. La problemática, ha logrado ser visibilizada, desde hace unos años, gracias a las movilizaciones y movimiento de mujeres en las calles, #NiUnaMenos, #NosQueremosVivas. Sin embargo, según datos publicados en Infobae en enero de este año, el Instituto Nacional de las Mujeres (INAM), sufrió un fuerte recorte en términos absolutos y relativos en su presupuesto para 2019. Su Plan Nacional de Acción para la Erradicación de la Violencia contra las Mujeres recibió este año un 40% menos que en 2018, lo que, sumado a la inflación, significa un recorte de recursos del 60% en solamente un año. El número final que se obtiene es que el Estado asigna en la actualidad poco más de 11 pesos por mujer al año.
En este panorama, se presentó en la ciudad de Rosario, por la presidenta del bloque Frente para la Victoria-PJ, Norma López, un relevamiento de casos de femicidios a nivel nacional y provincia, que llevo adelante el Equipo de Género de la concejala. López indicó que “las cifras son más que alarmante. A nivel país se produjeron 236 casos de femicidios, de cuyo total 75 se concretaron con el uso de 75 armas de fuego, mientras que en Santa Fe el número llegó a 34 episodios mortales, utilizándose 15 armas de fuego”. Cuando se accede a las modalidades de los episodios delictivos del tipo que nos ocupan, nos encontramos con que, en Santa Fe, del total de 30 femicidios en el lapso enero-agosto, hubo 14 muertes por armas de fuego (46,67%) y 16 casos que fueron atribuidas a otras modalidades como por ejemplo armas blancas y ahorcamiento, ente otras. En Argentina, las 68 mujeres muertas con armas de fuego implican un 31,05% y las 151, de otras modalidades representan el 68,95%.
Vale apuntar que el 63,34% de las mujeres asesinadas en Santa Fe tenía menos de 34 años y el 46,67% de los femicidios se cometiendo en el domicilio de la víctima.
El total de femicidios, en todo el país, de enero a agosto 2019, son la acumulación de 219 femicidios: Buenos Aires, 76; Santa FE, 30; Córdoba, 14; Misiones, 13; Tucumán, 12; Mendoza, 8 y el resto de las provincias, 78.
López destacó que “Desde hace una década venimos haciendo relevamientos y el complementario registro de casos de femicidios en Argentina y en Santa Fe y, desde hace algunos años hemos construido como aporte los mapas ge referenciados, considerados primeros en Latinoamérica, siguiéndonos en este esfuerzo el Distrito Federal de México. Ello nos posibilito discernir que el año pasado cerramos con 38 crímenes contra las mujeres que pueden ser calificados de femicidio, o sea que la violencia machista sobre las mujeres se incrementó ostensiblemente, en un contexto de criminalidad en el que el Estado no procuró ni procura la necesaria protección de las mujeres”.
Para López “La mirada machista también está inserta en el Estado y en las tomas de decisiones, porque si no se puede entender lo que sucede al interior de la policía de Santa Fe; no puede entender la disminución para mujeres en los cargos jerárquicos; en los ámbitos públicos, en la cantidad de ministras y secretarías y tampoco se puede entender que no crezcan los presupuestos”. La concejala convoco a todas las mujeres a participar el próximo 6 de octubre de la “Jornada Federal del Frente de Todos del país simultaneo juntas de cara al #27deOctubre #FernandezFernandez” que se desarrollara en la FDER. https://www.normalopezsf.com.ar/mapa-de-femicidios-santa-fe/
En consecuencia, el secretario del Colegio de Abogados de la ciudad de Rosario, Dr. David Lisandrello, presento en el XXX Congreso Nacional de Derecho Procesal en San Juan: “Los desafíos que imponen el Derecho al Olvido y el Ni Una Menos al procesalismo argentino” por David Lisandrello.La ponencia, releva la importancia de la medida innovativa y la anticautelar como tutelas procesales: “Consideramos que debe incorporarse expresamente al sistema el principio de inocuidad, en el que jueces y abogados, propongan favorecer aquellas soluciones que resulten menos dañinas para todas las partes involucradas. Y, agrego: “Generalmente esta actitud se suma a la de ralentizar el proceso lo más posible y dilatarlo innecesariamente, ya que, mientras se mantenga el status quo generado por la cautelar abusiva, ellos “ya ganaron” perjudicando, y hasta quizás fuercen la celebración de algún acuerdo leonino para el malcautelado”. Lisandrello, exhibe la ineficacia, y hasta tardía que resultan las medidas utilizadas en los procesos judiciales, en la actualidad, frente la vulnerabilidad de la mujer que es víctima de violencia de genero. Por último, afirmó: “Como vemos la protección adecuada de los derechos derivados por el colectivo #NiUnaMenos, van más allá que la simple autosatisfacía de exclusión de hogar o restricción de acercamiento prevista por las leyes de violencia familiar vigentes. Deben crearse normativas que protejan el antes, el durante y el después de la situación de violencia. Deben adaptarse las prácticas a pesar de que aún no existan las normativas”.
Para culminar este beneplácito, que me otorga mi “condición” de ser mujer, debemos saber que mientras los cifras sean carpetas amarillas que recorren los tribunales de cada provincia, con motes, que deambulan por los pasillos del Poder Judicial clamando por Justicia. Debemos, alzar la voz de #NiUnaMenos, por cada amiga, compañera, vecina, hija, malnacida, prostituta, y malcogida que quiere decidir sobre su cuerpo para no ser más sometida, ni muerta.
Como dice el libro de Eva Figes, “Actitudes Patriarcales: Las mujeres en la sociedad”: “El hecho de que muchos de nosotros demos esto por sabido, que no hagamos el menor esfuerzo para mantenernos aparte, y en cierto sentido, salir de nuestra propia piel por algún algún tiempo y echar una larga, firme e interrogada mirada ayuda a perpetuar la tradición, significa que nos encontramos mas que a gusto con el papel que la sociedad nos asigna, aceptando las normas externas. Y, no es de extrañar, porque salir de sí mismo es un proceso arduo que no tarda en producir vértigo” …
Pero es absolutamente necesario que lo intentemos, si de verdad queremos emplear la mayor parte de nuestro tiempo y capacidad en cambiar la visión de un mundo que fue creado a “medida del hombre”
Por Manuela Porta